Viajamos esa tarde por las onduladas rutas de Costa Rica para hacer la sesión de fotos en la palya con las ultimas gotas del sol, pero las carreteras estaban bloqueadas por la lluvia. Después de debatir que hacer con los novios, decidimos pasar la noche en un hotel y partir temprano a la mañana hacia la playa del parque Manuel Antonio (en las costas del pacifico de Costa Rica) . Y así fue, cenamos esa noche juntes les tres, nos reímos compartimos historias hablamos de nuestras culturas y a la mañana siguiente las fotos se dieron con una naturalidad magica, producto de toda la aventura vivida antes.